Existen muchos puntos de vista diferentes respecto al trabajo en casa. La realidad es que en nuestro país, el teletrabajo sigue siendo una opción muy desconocida, por esta razón, muchas personas asocian el trabajo en casa con la comodidad, el confort, el placer… Prácticamente, asocian el teletrabajo con algo así como un hobby que te reporta dinero y placer.
Nada más lejos de la realidad conviene tener mucho cuidado a la hora de no confundir los conceptos. Sencillamente, porque el teletrabajo, es como su propio nombre indica una forma de trabajo más. Ni mejor, ni peor, simplemente, diferente. Pero está claro que tener el empleo en tu propio hogar puede llegar a esclavizarte de una forma inhumana en caso de que no sepas establecer los límites y marcarte unas pautas. Es decir, no siempre tienes que estas disponible para el trabajo porque aquel empleado de la empresa, se olvida de los asuntos laborales al salir de la oficina para dedicarse a sus temas personales.
El trabajo en casa de hecho, se hace más duro todavía ante un momento de estado de ánimo bajo. Y es que, tener la motivación de ir a la oficina para fichar a las ocho de la mañana, ya marca una obligación necesaria para muchos empleados. Hay gente que por su propio modo de ser, necesita más de una autoridad externa en tanto que no tiene la autodisciplina necesaria. Por ello, quien no tiene dicha disciplina puede dejarlo todo para el último momento al dejarse llevar por la pereza.
Además, hay personas que no valoran del mismo modo el trabajo en casa, ya que al estar en casa, piensan que también puedes hacerte cargo por igual de la familia, de las labores domésticas y de todo. Pero la realidad, es que el trabajo en casa puede ser agotados e implica un descanso.
Imagen: Saber Invertir