Tomás Burgos, secretario de Estado de la Seguridad Social, ha señalado que el Ejecutivo quiere reestructurar el modelo de jubilación parcial y también la anticipada «para que sea la excepción y no la regla». Estas declaraciones han tenido lugar en la rueda de prensa donde se valoraba la afiliación de septiembre, donde también ha dicho que alejar la edad real a la que los trabajadores se jubilan de la edad legal para hacerlo, es una «gran losa» para que el sistema público de pensiones pueda seguir adelante tal y como lo conocemos hasta ahora.
Por ello, próximamente se presentará en el Pacto de Toledo del Congreso de los Diputados un informe sobre la situación para analizarlo y presentar posibles soluciones al problema.
En estos momentos no se conocen los detalles, pues hay que esperar al Pacto de Toledo para fijar, por ejemplo, el calendario en el que se va a llevar a cabo esta reestructuración, pero que lo normal es que conlleve una gradualidad. Lo que sí ha querido dejar de manifiesto es que en España una de cada dos jubilaciones es de carácter anticipado.
Con esta reforma de las jubilaciones se pretende buscar una continuidad del trabajador en el mercado laboral y evitar el abandono prematuro. El Gobierno está obligado a revalorizar las pensiones por la desviación del IPC, pero también es cierto que nadie esperaba esta subida tan pronunciada, de un 3,5 %, por lo que habrá que establecer el mecanismo para abonar esta diferencia y cumplir así con la ley, pensando siempre que quedan aun dos meses para conocer la desviación real del IPC.