Pesimismo generalizado entre los trabajadores españoles, según ha revelado el último barómetro del CIS. Este estudio, que se viene realizando cada noviembre, revela además que los parados ven cada vez más complicado reengancharse a la actividad laboral. Son ya tres de cada cuatro parados, los que creen que en 2013 no encontrarán trabajo.
Si en noviembre del 2011 los encuestados que tenían trabajo consideraban “muy o bastante probable” perder su puesto de trabajo en los siguientes 12 meses eran el 17%, ahora esta cifra llega al 24,6%. Es decir, de os casi 18 millones de trabajadores que hay en estos momentos en España, más de 4 millones ve en peligro su situación laboral actual.
Un alarmismo desproporcionado, ya que durante el 2012 no se llegarán a destruir 4 millones de puestos de trabajo, pero que son un síntoma del estado de confianza que vive España en estos momentos, avasallada por las cifras negativas.
De hecho, cuando se pregunta a los encuestados por la percepción sobre la situación económica y política, nueve de cada diez tildan de “mala o muy mala” la coyuntura económica y solo el 0,3% la juzga “buena o muy buena”.
Por último, preguntados por la evolución de la economía de un tiempo a esta parte, un 68,2% cree que la crisis está peor que hace un año (en noviembre del 2011 ese porcentaje era siete puntos más bajo). No solo eso, ya que casi la mitad, el 47,3%, augura que el año que viene será aún peor, una cifra 15 puntos por encima de la expectativa de hace un año, precisamente al poco de producirse el cambio de gobierno.