1. En primer lugar, el motivo más obvio para hacer un proceso de coaching es para encontrar un nuevo trabajo.
2. En segundo lugar, muchas personas se dan cuenta de que han agotado sus posibilidades presentes en un área profesional y tienen que reinventarse a sí mismas y buscar otras alternativas.
3. Muchas personas sienten en plena crisis que han perdido las riendas de su vida laboral. Por ello, un proceso de coaching es la excusa perfecta para recuperar el control de la situación porque tú eres el dueño de tu destino.
4. Cada circunstancia personal también varía. Existen personas que llevan mucho tiempo sin trabajo. En ese caso, un proceso de coaching es especialmente útil para aquellos que llevan un tiempo sin trabajar y sienten que se han quedado descolgados del sistema.
5. Muchos desempleados tienen la idea de montar su propio negocio y ser emprendedores pero no saben cómo llevar este proyecto a término. En ese caso, toda ayuda es bienvenida.
6. Un proceso de coaching laboral puede ser muy útil para ver el vaso medio lleno, para no dejarte vencer por el dramatismo de las derrotas que tiene la vida y retomar con fuerza el camino hacia el éxito. Hoy es un día excelente para empezar de nuevo con la misma fuerza que cuando tenías veinte años.
Un proceso de coaching es una puerta abierta hacia la verdad que hay en tu interior y que contacta con tus deseos.
Foto – Expocoaching